III Congreso de Residentes, JMF, Tutores y Unidades Docentes de la semFYC
6-7 de junio de 2025
Atención Primaria.
Inflamación digital.
Enfoque individual
Mujer 68 años, con antecedentes personales de síndrome ansioso-depresivo y cirugía de túnel carpiano de mano derecha, que consulta por inflamación brusca hace 4 días de 3er dedo de mano derecha, adquiriendo coloración azulada. Niega traumatismo o sobreesfuerzo previos. No dolor ni impotencia funcional. No hay episodios similares.
Exploración física: edema y hematoma en ese dedo, no borra pliegues articulares ni hay datos de sinovitis. Movilidad completa salvo leve limitación a la flexión palmar de interfalángica proximal. Resto de dedos normales.
Enfoque familiar y comunitario
Está asustada por un antecedente familiar de trombosis. No es usuaria habitual de atención primaria.
Juicio clínico, diagnóstico diferencial, identificación de problemas
Planteamos diagnóstico diferencial con trombosis de vena digital, síndrome Raynaud, isquemia arterial, artritis interfalángica, tendinitis o sinovitis.
El síndrome de Achenbach o hematoma paroxístico de los dedos es un trastorno vascular de etiología desconocida y curso benigno, más frecuente en mujeres mayores de 50 años, que se manifiesta por la aparición súbita de coloración azulada de los dedos de las manos y, menos frecuentemente, de los pies.
Tratamiento y planes de actuación
Se comunica el buen pronóstico y se tranquiliza a la paciente. No precisa tratamiento farmacológico ni ortopédico, ni pruebas complementarias ni derivaciones.
Evolución
Volvió a presentar la misma sintomatología en tres ocasiones con resolución espontánea, solo en una ocasión tras trabajos de jardinería.
Acudió posteriormente por iniciativa propia a urgencias hospitalarias, donde tras realizar analítica con coagulación y radiografía, que resultaron normales, confirman nuestro diagnóstico y su manejo terapéutico.
A menudo el paciente confiere más valor al juicio del especialista hospitalario que al del médico de familia. Tenemos el reto de informar y transmitir confianza a los pacientes, para evitar derivaciones innecesarias. Resulta imprescindible contar con la colaboración de los servicios de atención hospitalaria, incluyendo los servicios de urgencias.